Uno de los secretos mejor guardados de la NASA

El 15 de Noviembre de 1991, mientras el transbordador espacial Discovery de la NASA orbitaba el planeta Tierra, una de sus cámaras registró una secuencia que aún plantea serias interrogantes sobre el universo que nos rodea, y que podría ser uno de los secretos de la NASA mejor guardados.

En las imágenes capturadas durante la misión STS-48 de la NASA, que pueden apreciar líneas arriba, vemos un objeto circular desplazándose de derecha a izquierda. El objeto luminoso aparece repentinamente debajo de la línea del horizonte (1:30 segundos del video de arriba) y empieza a desplazarse hacia la izquierda. Lo extraño es que luego se detiene por medio segundo, (1:45 segundos del video) súbitamente realiza un giro y acelera. (1:46) Inmediatamente después observamos otro objeto que sale de la atmósfera a una gran velocidad como si fuera un misil disparado desde la superficie terrestre. (1:48)

Para algunos investigadores la maniobra realizada por el OVNI es prueba de inteligencia alienígena. Para otros es simplemente basura espacial alejándose del transbordador.

La NASA nunca negó la veracidad de las imágenes pero no tardó en fabricar su versión de los hechos.

Para la NASA estamos observando partículas de hielo flotando a pocos metros de la nave. En el video se observan dos destellos de luz parecidos a flashes fotográficos sobre el lado superior izquierdo, segundos antes que el objeto circular luminoso realice un giro y acelere.(1:45)

Según la NASA, estos destellos son los fogonazos provocados por el encendido de los cohetes del transbordador y el objeto circular que se mueve de derecha a izquierda es una partícula de hielo que cambia de rumbo y se acelera como una reacción a la fuerza y el calor provocados por los fogonazos de estos cohetes. Lo mismo para el objeto que parece un misil.



Si bien es cierto que en las paredes exteriores de los transbordadores se forman partículas de hielo que luego se desprenden naturalmente y flotan en el espacio, la teoría está muy lejos de ser concluyente.

Según expertos como Jack Kasher, Profesor de Física de la Universidad de Nebraska, una partícula de hielo no puede detenerse por medio segundo, como se observa en el video, para luego cambiar de dirección y acelerar.

Philip Plaitt, astrónomo y autor del libro “Mala astronomía”, sostiene que los fogonazos no son de los cohetes principales del transbordador sino de unos cohetes pequeños llamados “vernier” que usa el transbordador para cambiar de rumbo. Asumiendo que fuera cierto que la reacción de estos cohetes “vernier” es tan pequeña que no es capaz de crear algún tipo de movimiento perceptible en el video, al menos habría sido capaz de cambiar el rumbo pues si los encendieron fue justamente para “cambiar de rumbo”. En el video no se observa ningún cambio de rumbo, ni siquiera segundos después de los fogonazos. El investigador Lan Fleming habló con un ingeniero espacial de la NASA quien le informó que si existieran partículas de hielo flotando cerca a la nave tendrían que haberse formado durante esa misma misión para poder acumularse en las paredes exteriores del transbordador y luego desprenderse. Para que suceda esto tendría que haber existido una fuga en los sistemas del transbordador que seria reportada de manera automatica por la computadora a bordo.

En la mision STS-48 no se reportó ningun problema de este tipo.

Además, el objeto circular luminoso no sólo acelera por un par de segundos sino que mantiene su velocidad hasta desaparecer de la imagen. Sería muy improbable que los fogonazos lo hayan impulsado tan lejos como se observa en el video.(1:52)



Sospechosamente, pocos segundos después del inexplicable incidente la cámara del transbordador gira hacia la nave mostrando una imagen fuera de foco. Luego vuelve a enfocar, y segundos después la transmisión se interrumpe…

¿Coincidencia?

Las conclusiones del informe realizado por Mark Carlotto, especialista en análisis de imágenes digitales, sobre las trayectorias de los objetos observados en el video es casi concluyente.

“Nuestro análisis del video de la misión STS-48 muestra que la hipótesis de “las partículas de hielo propulsadas por los fogonazos de los reactores” no es coherente con el comportamiento de los objetos en cuestión. Los fogonazos de los cohetes podrían haber alterado la trayectoria de las partículas cercanas a la nave pero también habrían alterado el movimiento aparente de los estrellas y la curvatura de la Tierra, y eso no se aprecia en el video.”

Jack Kasher trabajó 10 años en el desarrollo del programa de defensa “Guerra de las Galaxias”. En su análisis de las imágenes de la misión STS-48 concluye que no existe ninguna explicación natural para el objeto circular, y que la única posibilidad es que se trate de una nave controlada por inteligencia extraterrestre. El sostiene que tomando en cuenta el radio de la Tierra, la altitud del transbordador y otras variables podríamos deducir la velocidad del objeto circular pasó de 0 kms por hora a miles de kms por hora en un segundo (1:46 en el video), algo imposible de lograr con nuestra tecnología, y que mataría en el acto a cualquier piloto humano.



Para Kasher el objeto parecido a un misil que sale disparado de la atmósfera terrestre tenía como objetivo el objeto circular y podría tratarse de algún tipo de proyectil o arma sofisticada disparada desde el planeta Tierra.

Lo extraño es que en el momento del incidente de la misión STS-48, la nave se encontraba sobre la costa Oeste de Australia. Coincidencia o suspicacia, existe una gran instalación militar norteamericana cerca a Alice Springs, en Australia central.

Nunca sabremos si lo que vemos en este video son partículas de hielo o naves extraterrestres. El incidente quedó olvidado pues el aparato de prensa de la NASA logró, en un mundo mucho menos globalizado que el actual, convencernos de que esas imágenes no tenían nada de extraordinario.

Pero lo realmente extraordinario es que este evento cambió la vida de un manager de televisión por cable de Vancouver, Canadá. Después de ver ese video, Martin Stubbs, quien tenía acceso directo a las transmisiones satelitales de las misiones espaciales de la NASA, decidió grabar en cintas de VHS todas las imágenes difundidas por las misiones de la agencia espacial norteamericana y encontró mucho más que supuestas partículas de hielo. Eso y más en la próxima entrega de esta serie sobre los secretos de la NASA

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