Mover las energías positivas en el hogar

Para que la energía que se propague en el hogar fluya positivamente debe tomarse ciertas consideraciones.
Comenzando con la puerta principal, pues es por donde ingresa el “Chi”, debe estar en buenas condiciones, sin manchones ni roturas, sin bisagras que rechinen. Su color debe depender de la orientación. Si esta para el norte: blanco o gris, en el noreste y suroeste: rojo, purpura, naranja o rosa, en el sudeste: negro, azul o purpura, en el oeste y noroeste: marrón, beige, amarillo, violeta o terracota, y en el sur: verde o marrón.
Nunca debe estar alineada con otra puerta o con una ventana. Debe tener una decoración que la haga atractiva, con matas a cada lado, y bien iluminada. La sala de estar se vincula con las oportunidades y el potencial. Los sofás y las sillas no deben dar la espalda a la puerta, o deben mirar hacia un punto como una chimenea. Deben permitir una fácil movilización entre ellos.
Las esquinas, lugares vacíos y áreas más obscuras deben iluminarse con lámparas o colocando plantas de hojas redondas. Un mueble con fotografías de una familia o eventos felices también es importante.
El cuarto de baño es el espacio de purificación de nuestro cuerpo. Su puerta debe permanecer siempre cerrada, ordenado y limpio, la tapa de los inodoros bajada y tener buena ventilación. No deben existir fugas de agua, y el área de bañera debe estar delimitada por una puerta o una cortina. No debe estar recargado ni de objetos ni de colores.
En la cocina el fogón debe estar lejos del fregadero, o tener entre ambos un espacio. El refrigerador debe estar si es posible dentro de madera. El color puede ser: colores tierra para fomentar tranquilidad, verde para crecimiento económico, azul que activa la comunicación. No debe haber basura acumulada, ni implementos rotos o sucios. En los dormitorios una cama orientada al noreste o norte favorecerá la salud, la energía vital, el dinamismo, las ganas de vivir. No debe estar bajo una ventana o cerca de vigas.
Los espejos no deben estar a la vista, ni a los pies de la cama. Aparatos como computadoras, televisores, o elementos de gimnasia, no deben estar dentro de la habitación porque perturban inconscientemente el descanso y la tranquilidad. Los armarios, cajones y otros elementos deben tener orden y limpieza, para transmitir serenidad.

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